Aunque nuestra Cuaresma de comienzo el Jueves Lardero, en nuestro querido pueblo nos empeñamos en estirarla un poquito más si cabe y así es como, dos Sábados antes, se celebra el ya tradicional “Día de las corporaciones”, día en el que empiezan a sonar las primeras notas del Imperio y en el que los cuarteles se engalanan para recibir la visita de numerosos forasteros con ganas de conocer nuestras costumbres e idiosincrasia y, ¿por qué, no? también de numerosos pontanos que aún no han tenido la suerte de conocer algunos cuarteles de nuestra localidad.
Así es como, coincidiendo con el Día de las Corporaciones, La Sentencia de Jesús, desde hace unos diez años, celebra una particular cena que sirve para dar el pistoletazo de salida a estas fechas tan esperadas. Este año se decidió no hacer una cena como tal, pero si una junta con unos aperitivos para seguir manteniendo esta bonita tradición.
En esta ocasión la jornada comenzaba antes de lo habitual, en torno a las 17:30h de la tarde, hora en la que nuestro amigo Antonio Luis Bascón esperaba, cámara en mano, para hacernos una fotografía a los distintos hermanos de nuestra corporación; fotos que lucirán en las paredes de nuestra casa cuartel próximamente y que servirán para sustituir las anteriores que habían quedado un poco deterioradas y en las que, además, faltaban varios hermanos. Desde estas líneas agradecer su gran labor profesional y su disposición hacia nosotros.
Una vez terminadas las fotografías se dio paso a la Junta General donde se pusieron sobre la mesa varias cuestiones relativas a la inminente cuaresma, dejándose entrever en el ambiente la ilusión y las ganas de afrontar una nueva cuaresma. Mientras se sucedían los distintos puntos del día, nuestros hermanitos de corporación, Raúl García, Rafael Cabello y Francisco Morillo, se encargaron de servirnos unas viandas para hacernos más amena la junta.
Una vez finalizada la junta y entrados ya en el Domingo, llegaba el momento mágico de la noche, la entrega de la prepata. Tomaba la palabra nuestro presidente Óscar Cejas, dando paso a nuestro hermano Javier Matas, encargado del diseño de la prepata, que explicaba que, de mutuo acuerdo con el presidente, habían decidido que esta prepata se quedase en propiedad nuestra Corporación por ser la primera que se daba entre esas cuatro paredes, ante el aplauso de todos los presentes.

Resaltamos desde estas líneas, el magnífico trabajo de nuestro hermano Javier, que una vez más nos deleita con su arte, uniéndose este a la larga lista de trabajos suyos que ya decoran nuestra Casa Cuartel.

Con la entrega de la prepata, se daba por finalizada la Junta, dando paso a los últimos coletazos del día con las bonitas tertulias que surgen en torno a la mesa, COMENCEMOS A SOÑAR…